sábado, 30 de enero de 2010

AUREA SINERGIA

ÁUREA SINERGIA (RECUERDO)

El anfitrión conecta las luces espasmódicas
para las reverberaciones furibundas de las
entelequías ligustrinas
Y en el centro helado del vacío espiral
se acomodan los cohortes inexpresivos
de los derooteros desleídos
para la copiosa ingestación catártica
que tus manos han desguazado
con fría apelación astral.
Me duela verte, mujer,
todavía por acá.

SINERGIA
 
Éste es el parque del terror 
psicológico, nauseabunda 
propagación de escamas
terminales.
Los ecos de de viejas mutilaciones
estacionan acomplejados y agarrotados,
dispuestos a sacarle punta
a sus cometidos.
Creyéndose dueño de una ríspida
talante,
el hipérbaton se transluce
en derramamientos de cristal.
Hiperbaton transeúnte
de lluvias decrépitas y vacilantes,
de visecciones nutridas
por la tersa piel de la sabiduria.
Muestra sus garras la flor crimea,
LLora sus lamentos en el monte
de los delitos.

AUREA SINERGIA 

Sabido como es que el amor
suele correrselas
de axialésnica piorrea
y que la cibernética limprecación
del ariete escluzeano
bisbisa una seguidilla
cachofleznica
de amalotes petulantes,
a cada pestañeo del gusano gigante
la habitación se disolvía
en prisquísimos maniqueos
hilarantes
de un color diferente.
Voluta jónica,
estrusco fulgural.

El maleficio se consumirá
mecherobunseneanamente
sinmás
y la parvedad astenia
de la pirotécnica inmanencia
perderá su ignota lasitud
de bacanal horia malhabida.

Ah! zuzcos! ignomia monocorde!
...pero cuántos melestrunges 
floridos, cuántas melestenzidad
tamizada, y cuánta perchero
espuerinjido!

Sistemobadaún en gotas
y el pozo fulgurante
dem energia psocotrópica
clonada analgpesica mandrágora.
La espiritualidad y todo su bagaje
Ilusiones ópticas óptimas.
El sigsifrido tozudo
y la queesestomequeresdecir
escaldarosa empiria tantoduraráeh
solo dejan
entreveer
la verdadera y difusa
personalidad psiconauta:
Rabdomancia distorsionada.


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